Redes

miércoles, 28 de febrero de 2018

El pensamiento político de Karl Marx- Taller en Córdoba (2018)

 TALLER DE PENSAMIENTO CRÍTICO

Coordinación: Mariano Pacheco (*)
Costo: a la gorra
Lugar: Café el Alba (9 de julio 482- Córdoba capital)
Días y horarios: jueves de 16 a 18
INSCRIPCIÓN OBLIGATORIA (cupos limitados): cronicasdesdecordoba@gmail.com

PROGRAMA DE LECTURAS (ver abajo)


I- Introducción
Vida y obra de Karl Marx (charla-presentación).

II-El joven Marx
La alienación en Los manuscritos económico-filosóficos de 1844.

III- El encuentro con Engels
El Manifiesto comunista.


IV- Prolegómenos
Las tesis sobre Feuerbach, el prólogo a la Contribución de la crítica de la economía política y La ideología alemana (extractos).


V- El militante
 Lecturas en torno a la experiencia de la Asociación Internacional de los Trabajadores (AIT).

VI- La comuna de París
La forma política del proletariado en La guerra civil en Francia.


VII- Retrospectiva y perspectiva
La comuna Rusa y la cuestión colonial en los textos tardíos del viejo Marx.

 VIII-Para leer El capital
Introducción a una lectura de la crítica de la economía política


IX- Lecturas de El capital
La acumulación originaria


X- Lecturas de El capital
El fetichismo de la mercancía y su secreto

XI-Lecturas de El capital
Maquinaria y gran industria

XII- Pensar a Marx en la actualidad Latinoamericana
Encuentro de debate y reflexión


* SOBRE MARIANO PACHECO:
Ensayista y comunicador popular. Autor de los libros Cabecita negra. Ensayos sobre literatura y peronismo (Punto de Encuentro, 2016); Montoneros silvestres (1976-1983). Historias de resistencia a la dictadura en el sur del conurbano (Planeta, 2014); Kamchatka. Nietzsche, Freud, Arlt: ensayos sobre política y cultura (Alción, 2013); De Cutral Có a Puente Pueyrredón, una genealogía de los Movimientos de Trabajadores Desocupados (El Colectivo, 2010) y y co-autor de Darío Santillán, el militante que puso el cuerpo (Planeta, 2012). Redactor en el periódico Resumen Latinoamericano y el portal La luna con gatillo (conductor del programa radial del mismo nombre). Colaborador de los portales La tinta y Lobo suelto.
Contactos: Facebook: mariano pacheco Twitter: @PachecoenMarcha


Los devenires de Deleuze y Guattari (Grupo de Estudios Políticos de Córdoba)

 TALLER DE PENSAMIENTO CRÍTICO 2018

Coordinación: Mariano Pacheco (*)
Costo: a la gorra
Lugar: Café el Alba (9 de julio 482- Córdoba capital)
Días y horarios: miércoles de 16 a 18
INSCRIPCIÓN OBLIGATORIA (cupos limitados)


PROGRAMA DE LECTURAS (ver abajo)


 
I-
--Entrevista a Félix Guattari y Gilles Deleuze sobre el Antiedipo (en Conversaciones: 1972-1990. Hay versión digital).
--Entrevista a Gilles Deleuze sobre Mil mesetas (en Conversaciones: 1972-1990. Hay versión digital).


II-
--”Guattari según nosotros”, de Mariano Pacheco (versión digital).
– “Gilles Deleuze: variaciones antiedípicas”, capítulo 5 de Filósofos en la tormenta, de Elisabeth Roudinesco.


III-
Entrevista de Raymond Bellour a Gilles Deleuze (en Cartas y otros textos).
– “Deleuze y la máquina rizomática”, capítulo de Félix, de Franco Berardi (Bifo).


IV-
--Gilles Deleuze: “Sobre la filosofía” (en Conversaciones: 1972-1990. Hay versión digital).
--Gilles Deleuze, Félix Guattari: ¿Qué es la filosofía? (extractos)

V-
Control y devenir” y “Post-escriptum sobre las sociedades de control” (en Conversaciones: 1972-1990. Hay versión digital).

VI-
--Gilles Deleuze y Félix Guattari: “Rizoma”, introducción a Mil mesetas. Capitalismo o esquizofrenia ( Hay versión digital).

VII-
--Gilles Deleuze y Félix Guattari: “Tratado de nomadología: la máquina de guerra”, (extractos), capítulo 12 de Mil mesetas. Capitalismo o esquizofrenia (Hay versión digital).

VIII-
--Gilles Deleuze: “D” (Deseo), El ABCdario de Deleuze (hay versión en video).

IX-
– “Lo trágico”, capítulo uno de Nietzsche y la filosofía.

X-
--¿Qué es Ecosofía? Selección de textos presentados y agenciados por Stéphane Nadaud

XI-
--¿Qué es Ecosofía? Selección de textos presentados y agenciados por Stéphane Nadaud

XII-
Recapitulación. Debate abierto sin textos.


*MARIANO PACHECO:
Ensayista y comunicador popular. Autor de los libros Cabecita negra. Ensayos sobre literatura y peronismo (Punto de Encuentro, 2016); Montoneros silvestres (1976-1983). Historias de resistencia a la dictadura en el sur del conurbano (Planeta, 2014); Kamchatka. Nietzsche, Freud, Arlt: ensayos sobre política y cultura (Alción, 2013); De Cutral Có a Puente Pueyrredón, una genealogía de los Movimientos de Trabajadores Desocupados (El Colectivo, 2010) y y co-autor de Darío Santillán, el militante que puso el cuerpo (Planeta, 2012). Redactor en el periódico Resumen Latinoamericano y el portal La luna con gatillo (conductor del programa radial del mismo nombre). Colaborador de los portales La tinta y Lobo suelto.
Contactos: cronicasdesdecordoba@gmail.com Facebook: mariano pacheco Twitter: @PachecoenMarcha
www.palabrasprofanas.blogspot.com


domingo, 4 de febrero de 2018

Sobre Santiago Maldonado, la RAM y las operaciones de prensa (un posteo).


FUEGO (¿AMIGO?)...


Por Mariano Pacheco
(@PachecoenMarcha)



Hace unos días me topé con una nota de Horacio González en Página/12, en donde polemizaba con un artículo de Sergio Bufano publicado en el diario Clarín, en el que realiza una operación que, a esta altura, lo único que faltaba.
Me demoré días en leer el texto de Bufano, como no queriendo meterme en el tema, como queriendo esforzarme por retener en mi memoria la imagen de ese tipo amable con el que era posible polemizar con altura. Pero finalmente lo hice, leí el texto y, por las citas de González, ya intuía lo que se venía. Y se vino.
Bufano reduce la lucha mapuche a la RAM y a la RAM a un grupo extemporáneo que pasa a la lucha armada en momentos en que en el mundo ese método de lucha queda fuera de lugar (según el autor de la nota). Pero como si fuera poco, el remate del "fuego" (¿amigo?): contrapone la bondad de Maldonado con la "deserción" de los mapuches, en una suerte de construcción de "neoliberalismo de izquierda" (los integrantes de la RAM decidieron actuar, en plena retirada --en plena represión de Gendarmería Nacional-- bajo la lógica del "salvense quien pueda" y fue ahí cuando "dejaron tirado" a Santiago.
Hace tiempo que no sé nada de Bufano. Tampoco nos conocimos mucho, más que algunos cruces de correos electrónicos y la participación conjunta en una mesa en 2012, antes de que me viniera a vivir a Córdoba, en donde discutimos sobre la lucha armada (él venía de la experiencia de la revista con el mismo nombre, que luego se hizo anuario y yo estaba terminando de escribir mi libro Montoneros silvestres).
Creo que lo de Maldonado fue uno de los acontecimientos políticos de mayor envergadura de estos años cínicos. El hecho de que muriera ahogado no quita responsabilidad a un Estado que busca resolver los conflictos sociales a través de la represión, con fuerzas del orden como las que tenemos (las que asesinaron a Kosteki y Santillán, a Fuentealba, a Juan Kukoc y a Maldonado, que huía de las balas de Gendarmería.
Y también a Rafaél Nahuel, que nuestras bellas almas progresistas, a veces tan racistas, paracen no tener tan cuenta como a Maldonado (¿acaso la vida de un luchador mapuche vale menos que la de un pibe blanco de clase media?).
Cuánto o no pudieron ayudar a Santiago los militantes mapuches (no los "terroristas de la RAM", como sugiere Bufano y no deja de repetir el diario en el que publica su nota), es una discusión interna, nuestra, de los que llevamos a Maldonado y Nahuel en el corazón; los que nos indignamos ante la detención y el asesinato de compañeros, más allá de las diferencias políticas que podamos tener; los que sabemos que más temprano que tarde, las instalaciones del monopolio deberán arder, con sus laburantes afuera, gritando junto a su comisión interna: "Unidad de los trabajadores, y al que no le guste, se jode, se jode". 


IMAGEN: Flyer de La luna con gatillo (por Florencia Longo).

NOTAS:

"Ese Maldonado que no cesa". Por Horacio González: 



"De aprendices, partisanos y desertores". Por Sergio Bufano.


Diciembre en diciembre: masividad, organización, combatividad

SOBRE LA BATALLA DE LA PLAZA DE LOS DOS CONGRESOS

Por Mariano Pacheco


Por primera vez las jornadas insurreccionales del 19 y 20 de diciembre de 2001 se rememoraron en las calles. Atrás quedaron los escenarios en plazas, los extensos documentos a quienes nadie les presta atención, la larga fila de oradores poco escuchados. La acción directa dio un paso al frente. Este año se expresó en la lucha de calles la bronca acumulada.
Diciembre del 17 marcó un revés, un contragolpe a la tendencia cambiemista de instalar una nueva hegemonía en el país. De algún modo diciembre es la mejor fotografía del año duro, crudo, en el cual las luchas de las y los trabajadores de la economía popular jugaron un papel central: primero por hacer cumplir la Ley de Emergencia Social (aprobada en el Congreso en diciembre de 2016, tras varios meses de lucha); después por instalar el debate en torno a la necesidad de una Ley de Emergencia Alimentaria, siempre poniendo en acción al precariado, en muestras de fuerzas cuya principal característica fue la masividad (su pico más alto en San Cayetano, con sesenta mil personas movilizadas en Buenos Aires).
Pero diciembre del 17 marca también la mejor fotografía respecto de la persistencia de otras luchas que vienen de lejos. En primer lugar la de las mujeres, quienes primero con el grito de #NiUnaMenos y luego con el Paro Mundial lanzado desde Argentina pusieron en el centro de la escena un proceso de organización, luchas e insistencia en la visibilización que lleva ya décadas, como décadas lleva la persistente lucha de los organismos de derechos humanos, que tras el caso Maldonado y en el reclamo de libertad a Milagro Sala revitalizaron las mejores reservas de dignidad con las que contamos como pueblo. Organismos que surgieron tras la derrota (a picana, sangre y fuego) de los procesos de organización popular que pusieron en cuestión la propiedad privada, la misma que se ve cuestionada hoy por las luchas llevadas adelante por la comunidad mapuche que reclama autonomía y soberanía sobre tierras que han sido alambradas durante el anterior genocidio estatal.
Diciembre en diciembre porque la masividad, los niveles de organización y la combatividad demostradas en las jornadas del 13 y 14 y del 18 y 19 de diciembre expresan asimismo la mejor fotografía de aquello que quedó activo de 2001 en las subjetividades populares, luego de una década larga de un relato oficial que situó al 2001 en el lugar del infierno, el sitio al cual nunca más había que regresar, la experiencia diabólica a conjurar.
Diciembre del 17 como punto de llegada pero también como punto de partida. Porque este año no se expresó en Congreso un proceso creciente de resistencia popular, nacido en la periferia y extendido lentamente al centro del país, como en 2001. La dinámica de luchas actuales encuentra en Buenos Aires su centralidad y a veces su exclusividad.
La plaza del 18 de diciembre fue capaz de expresar una inteligencia común del campo popular, sin dirección política unificada. Importante fotografía, pero habrá que ver qué visualizamos al ver el video y ya no la foto.
En Congreso convivieron lógicas bien diferentes: movilizar y replegarse ante la represión; aguantar la parada sin enfrentar; hacer retroceder a cascotazos a las fuerzas de seguridad. Como casi nunca ocurre, las diferentes lógicas pudieron convivir sin muchas complicaciones. Por otra parte, también fue inédita la franja etárea expresada en la jornada: jóvenes haciendo sus primeras experiencias en la militancia; jóvenes que se sumaron a la política en los años kirchneristas; ya no tan jóvenes que protagonizamos el 2001 y las batallas previas de los años noventa; veteranos de los setenta que no estuvieron en los noventa y el 2001 pero sí durante la “década ganada”; veteranos que nunca dejaron de estar presentes en las luchas. A nivel social e identitario sucedió algo similar: la plaza del lunes 18 encontró hermanados, en una misma jornada, al Movimiento Evita y a todos los partidos trotskistas (los tres que integran el Frente de Izquierda y los Trabajadores: el PTS, Izquierda socialista y el Partido Obrero; el MST y el MAS y hasta el PSTU al que pertenece el “compañero-mortero”); sindicatos integrantes de las dos CTAs, como SUTEBA y ATE; agrupamientos de la CGT como la Unión Obrera Metalúrgica (UOM) y otros de la Corriente Federal de los Trabajadores (incluso el comunicado de la cúpula de la CGT, el mismo lunes por la tarde, condenando la “violencia” y no la represión, provocó el alejamiento de los metalúrgicos encabezados por Francisco “Barba” Gutiérrez); los movimientos sociales que integran el Triunvirato (Barrios de Pie, la Corriente Clasista y Combativa y los diferentes grupos de la Confederación de Trabajadores de la Economía Popular) y los que no se encuadran en dicha coordinación (el Frente Popular Darío Santillán; el Frente de Organizaciones en Lucha; el FPDS- Corriente Nacional); sectores del kirchnerismo (Patria Grande, alguna que otra columna de Nuevo Encuentro y La Cámpora) y la izquierda no trotskista (como las organizaciones que confluyen en Poder Popular). Docentes, estatales, estudiantes, jubilados, universitarios, trabajadores del subterráneo y la gran masa del precariado: kirchneristas no peronistas y peronistas no kirchneristas (también peronistas-kirchneristas); troskos, maoístas, guevaristas y otros izquierdistas sin ismos. También anarcos, por supuesto. Y algún que otro “servis”, que en medio de tamaña hazaña, no encontraron su lugar bajo el sol.
Diciembre del 17 expresó en las calles un crisol que ya no se expresa en las interpretaciones del propio diciembre realizadas días después. El frente único anti-neoliberal se expresó con claridad en jornadas memorables, pero el balance es dispar. Habrá que ser audaces entonces para combinar ambos aspectos: golpear juntos al macrismo; pensar/proyectar por separado. Resulta ilusorio pensar en combinar miradas tan dispares (afectos de la rebelión/lógicas de la gobernabilidad), pero también ilusorio resultará pensar que la propia estrategia basta.
Habrá que ver si el espíritu de diciembre se sostiene para las próximas batallas. El “reformismo permanente” ya está anunciado. Ya vimos cuán reformistas son para llevarlo adelante. Y también: cómo sorprende un pueblo que se dispone a desafiarse más allá de lo que se supone que puede.