domingo, 27 de julio de 2025

La hipótesis comunista y el realismo capitalista (Encuentros de Filosofía)

  


¿Qué puede un cuerpo precarizado por el pluriempleo y los bajos salarios? ¿Qué puede un pueblo socialmente avasallado y políticamente desorientado? ¿Es posible sostener un combate abierto, ya no sólo contra las injusticias que producen sufrimiento en nuestras vidas, sino también contra la resignación que conduce al ensimismamiento de nuestras experiencias singulares y colectivas?


En este ciclo de encuentros nos proponemos recuperar un conjunto de lecturas contemporáneas para caracterizar el momento actual, y rescatar aquellas posiciones teóricas que, junto a las resistencias y las luchas que combaten la resignación reinante, apuestan aún a transitar en el nuevo siglo un proyecto de justicia e igualdad.

 

Miércoles de 19 a 21- Quincenal

Inicio: 13 de agosto (2 encuentros)


COORDINACIÓN: Mariano Pacheco

CONSULTASpalabrasprofanas@gmail.com


LECTURAS:

 

AGOSTO 

 

Fisher: Realismo capitalista. ¿No hay alternativa? (“Es más fácil imaginar el fin del mundo que el fin del capitalismo”)

 

Rolnik: Esferas de la insurrección (“Insurrecciones micro y macropolíticas. Diferencias y entrelazamientos”)

 

Guattari/ Rolnik: Micropolíticas (II: “subjetividad e historia”, selección)

 

SEPTIEMBRE

 

BADIOU: “La idea de comunismo”

 

FEDERICI: “Del comunismo a los comunes. Una perspectiva feminista”

 

LEWKOWICZ: “La política, un placer olvidado”

 

viernes, 25 de julio de 2025

Confesiones de invierno. Memorias de escritoras (Taller de lectura y escritura)

Duras- Beauvoir- Kamenszain

 



Filosofía y Literatura como iniciativas de salud

Ciclo: “Escrituras sintomáticas y modos de vida”

 


LECTURAS

 

*MARGUERITE DURAS

El amante; Nada más

 

*TAMARA KAMENSZAIN

Libros chiquitos; El libro de los divanes (selección)

 

*SIMONE DE BEAUVOIR (selección)

Memorias de una joven formal 

La plenitud de la vida 

La fuerza de las cosas 

Final de cuentas 

La ceremonia del adiós

 

PROPUESTA

Por segundo año consecutivo sostenemos este espacio que, cada dos meses, se renueva por bloques temáticos y abre su convocatoria para nuevas incorporaciones. Bajo el lema de “seguir el rastro de nuestros síntomas” como programa de escritura, nos proponemos asumir un desafío: comenzar a escribir o bien (si ya lo hacemos con frecuencia) retrabajar cuestiones vinculadas a la composición formal.

 

Para ello dedicamos un encuentro por mes a escribir nuestros propios textos, guiados por una consigna que sirve para elaborarlo: una entrada de Diario, una crónica o relato, una entrevista narrada, un microensayo, que luego es trabajado colectivamente. El proceso culmina con una devolución personalizada, con corrección y sugerencia de edición por parte del coordinador. Por otro lado, dedicamos el otro encuentro del mes a conversar sobre las lecturas seleccionadas, y rescatar aquellos elementos que pueden servirnos para nuestras propias escrituras.

 

En este tramo de dos meses abordaremos, por un lado, los ejercicios de memoria que nos permitan poner en el centro de la narración un núcleo de recuerdos que disparen la escritura sobre aquello que vivenciamos, escuchamos, vimos, imaginamos. Por otro lado, el trabajo en torno a cómo comenzar y finalizar un texto, cómo titularlo y cómo practicar la descripción de escenas.

 


Laboratorio de Experimentación Narrativa

Escuela Autogestiva de Literatura Aldo Oliva

 

Coordinación: Mariano Pacheco

Actividad virtual- Arancelada

 

Miércoles de 19 a 21- Quincenal

Inicio: 6 de agosto (4 encuentros)

 

CONSULTAS:

palabrasprofanas@gmail.com

 

Deleuze- Guattari: introducción a la vida no fascista

  

 

¿Cómo evitar ser fascista? ¿Cómo librar nuestros dichos y nuestros actos, nuestros corazones y nuestros placeres, del fascismo? ¿Cómo revelar y poner en evidencia el fascismo arraigado en nuestra conducta?, se preguntaba Foucault al escribir el Prefacio a la edición estadounidense de El Anti-Edipo, primer tomo de Capitalismo y esquizofrenia de Gilles Deleuze y Félix Guattari.

 

La interrogación sobre cuánto de eso que decimos combatir se hace carne en nuestros propios cuerpos, y se reproduce de manera silenciosa en nuestras vidas cotidianas, para no ser antifascista al nivel molar, sin ver al fascista que uno mismo es, que uno mismo cultiva y alimenta, mima, y conjurar las formas cotidianas de clasificación, de jerarquización y de opresión en los grupos que construimos y habitamos.

 

El deseo como exilio, como desierto. Tribu en el desierto. Frente a los modos de existencia y de pensamiento-para-el-mercado, ante tanto exceso de comunicación que bloquea las posibilidades de resistir el presente, una apuesta por nuevos modos de creación. Potencia de la metamorfosis, multiplicidad pura y sin medida, capacidad de devenir manada, raza impura, mestiza, y bastarda, capaz de ejercitar otra justicia, gestar otro movimiento, otro espacio-tiempo. Nomadismo político-existencial: huir, sí, pero mientras se huye, tomar un arma.

 

Análisis militante del inconsciente: apuesta crítico-creadora para la liberación anímica, justicia (psico) social capaz de combatir (de manera violenta y brutal) los aparatos de castración y ampliar las sendas de un devenir revolucionario que conquiste una nueva tierra, en la que florezca un pueblo nuevo.

 


Encuentros de filosofía- Coordinación: Mariano Pacheco

Actividad virtual- Arancelada- Martes de 19 a 21- Quincenal

Inicio: 5 de agosto

 

CONSULTAS:

palabrasprofanas@gmail.com

 

 

LECTURAS

 

*DELEUZE/ GUATTARI:

-- “Introducción al esquizoanálisis” (El Anti-Edipo)

-- “Tratado de nomadología: la máquina de guerra” (Mil mesetas)

-- “Geofilosofía”, (¿Qué es la filosofía?)

 

* FOUCAULT

--Prefacio a El Anti-Edipo

 

*PERLONGHER

--Los devenires minoritarios

 

*ROLNIK

--Diez sugerencias para una descolonización del inconsciente

 

martes, 22 de julio de 2025

Amamos a Puig

El sábado fuimos con Marie a Boedo, a ver en Hasta Trilce “Cae la noche tropical”, dirigida y protagonizada por la gran Leonor Manzo, en una puesta en escena junto con Eugenia Guerti y Carolina Tejada (estoy preparando un comentario para mi columna radial en AM 830 y para La luna con gatillo, así que no quisiera extenderme ahora en esto). La cuestión es que entre la obra que fuimos a ver y que últimamente estuve leyendo mucho de y sobre Puig para el capítulo sobre “El beso de la mujer araña” que incorporé a mi libro “Literatura y revolución: ensayos argentinos”, hoy me puse a buscar algunas cosas en internet y ¡Zas!, reparo en que se conmemoran 35 años desde su partida. No lo recordaba.


Puig construye su “ficción de origen” como escritor más vinculado al séptimo arte que a las bibliotecas: en este caso, aparece ligada a la experiencia infantil de acudir al cine, casi a diario, con su madre, una farmacéutica egresada de la Universidad Nacional de La Plata donde también cursó Filosofía y Letras– que había llegado al lugar acompañando a su padre, un hombre simple dedicado al comercio.


Ese mundo infantil es el que funciona como trasfondo de sus dos primeras novelas: La traición de Rita Hayworth y Boquitas pintadas. No está de más recordar que Puig hace su debut en la literatura argentina en 1968, cuando lo publique la editorial Jorge Álvarez, tras ser rechazado por Sudamericana y “bochado” por Mario Vargas Llosa en el Concurso de la editorial Sex Barral, porque dijo el escritor peruano– se sabía muy bien cómo hablaban los personajes de Puig, pero no cómo escribía él.


Aunque allí radicaba su encantador secreto. Por eso Ricardo Piglia, en “Las tres vanguardias” plantea:

“Hacía muchos años que en la literatura argentina no se encontraba un oído como el que él tenía para el ritmo del habla. Y lo sacrifica. Lo retoma recién en la última novela, “Cae la noche tropical”, en el que practica ese virtuosismo haciendo hablar a dos mujeres ancianas durante cincuenta y cinco páginas nada más que para hacer oír el murmullo de la lengua. Después empezará la narración, pero en ese primer y largo momento es como si él dijera: “ahora van a ver de lo que soy capaz…”.

 


Las fotografías, que ilustran un excelente ensayo de Martín Villagarcía sobre Puig y el Frente de Liberación Homosexual, fueron extraídas del sitio Moléculas Malucas. Debo su lectura a la recomendación de mi amiga Mabel Bellucci

lunes, 21 de julio de 2025

División Palermo (segunda temporada)


“No es con cólera, es con risa que se mata”, decía Nietzsche en su Zaratustra.

Y la frase hoy resuena con cierta intriga, ante tanto cinismo que copa los programas “periodísticos”, los streaming y la política. Pero cuando se trata de una producción artística no puede resultar más que bienvenida.


División Palermo, creada, dirigida y protagonizada por Santiago Korovsky, esta ficción audiovisual que ya en su primera temporada exponía con ácido humor todo el bestiario de la multitud contemporánea que transita por Buenos Aires (enanos, ciegos, personas trans, con problemáticas psiquiátricas, paralíticas, migrantes de países vecinos, amputados, downs…), regresó luego de dos años (¡un montón en los tiempos actuales!) y su retorno vino recargado, acorde al cambio de contexto, no sólo político-institucional, sino también socio-cultural.


Si en 2023 se eludía la cultura progresista de la cancelación abordando con humor a todas aquellas personas integrantes de “minorías” que se salían de la “norma mayoritaria” que rige nuestras sociedades, en 2025 el gesto se sostiene y se duplica, poniendo en el blanco, también, a figuras de las extremas derechas (Carolina Pozzo, en el papel de la ministra de Seguridad Valeria Lois, tiene obvias coincidencias con Patricia Bullrich). Y a quienes miramos la saga, puesto que no hay condescendencias del tipo “la sociedad víctima de la reacción”, puesto que, como tan bien señalaron Deleuze y Guattari (1972), retomando la línea freudo-marxista abierta por Wilhem Reich (1933), “las masas también desearon el fascismo” y todes nosotres cultivamos y mimamos esas moléculas de microfascismo que nos habitan y constituyen.


A los papeles fundamentales de Pilar Gamboa (Sofía Vega, la guardia urbana en silla de ruedas que aquí contribuye a sortear el tabú frente a la sexualidad disca), Daniel Hendler y el propio Korovsky, esta segunda temporada suma, entre otres, a unos no menos fundamentales actores y actrices de renombre, como Juan Minujín, Alejandra Flechner, Martín Piroyansky e Inés Efron. En el camino se quedó Nilda Sindaco (“Bety”), la actriz que Korovsky conoció internada en el Hospital Moyano y logró que pasara de un neuropsiquiátrico a las pantallas de Netflix. 



sábado, 19 de julio de 2025

Sobre la obra de teatro "El debate" (Tosco- Rucci)

Tosco- Rucci: teoría estética de los dos angelitos

 

Mi tío Claudio me invitó a ver “El debate”, esta obra de teatro dirigida por Manuel Gomzález Gil, protagonizada por Gabriel Rovito y Pepe Monje (en el papel del luzyfuercista cordobés y en el del Sec. Gral de la CGT), junto con Joselo Bella, Miguel Core, Sebastián Dartayete y Enrique Dumont (en el papel de los conductores –uno de ellos: ¡Gerardo Sofovich!– y camarógrafos del programa de TV en donde se llevó adelante aquella polémica).

 

En términos formales la obra no está mal. De hecho, fui a verla sin chusmear nada antes en internet ni leer ninguna crítica, así que me preguntaba como resolverían la puesta en escena para que no fuera un embole: presenciar a dos tipos discutiendo en un escenario. Y la verdad es que se resuelve bien, con ese montaje del estudio, las pausas publicitarias y cierta contextualizacion que presenta a través de uno de los camarógrafos.

 

Lo que me pareció más flojo fue el guión, la perspectiva que, al salir de la sala, comprendí mejor, al ver el folleto que dice en su contraportada: Unión Obrera Metalúrgica- Capital, con el logo de la UOM y la frase “En memoria de José Ignacio Rucci, mártir del Movimiento Obrero Argentino”.

 

“¡Bastante bien parado queda el dirigente sindical clasista y combativo ante tamaña promoción de la obra!”, pensé. Aunque me quedó el sabor amargo de ese consensualismo tan típico de estos últimos tiempos (que las derechas extremas vinieron a su modo a poner en cuestión).

 

En lugar de “dos demonios” lo que aparece aquí es una suerte de “Teoría estética de los Dos Angelitos”: se denuncia la muerte en la clandestinidad de Tosco, enfermo y perseguido por las Tres A, tanto como la ejecución de “Traviata” a manos de un comando guerrillero de la izquierda peronista. Y se destaca la capacidad de ambos de dialogar, dejando afuera el marco de enfrentamientos de proyectos irreconciliables (sobre todo el rol reaccionario de Rucci y los hechos de sangre en que estaban involucrados sus custodios).

 

Así y todo, es tremendo el contraste de contextos: el derechista Rucci parece con sus definiciones de febrero de 1973 estar situado a la izquierda de cualquier dirigente sindical de 2025.

 

Nunca está de más volver a escuchar el debate:

https://www.youtube.com/watch?v=0cs68j_yYxo

 

miércoles, 16 de julio de 2025

“Ni una palabra” de Harlan Coben

Es una serie atrapante, adictiva diría.



Un adolescente muerto, otro desaparecido, dos mujeres que se suman a la lista de fallecidos, nuevas desapariciones, pero también, las problemáticas existenciales durante la adolescencia, el vínculo padres-madres/ hijes, los consumos problemáticos, los secretos, la violencia generalizada, la explotación de mujeres, la investigación policial, la justicia, el narcotráfico, el bullying escolar, la infidelidad matrimonial… Ufff son demasiadas cosas para 6 episodios de menos de una hora cada uno.

 

Lo que más me gustó la serie fue que una de sus protagonistas (Magdalena Boczarska en el papel de Anna, la madre del joven desaparecido), practicara kendo.

 

Ambientada en Varsovia, “Hold Tight” es una de las tantas adaptaciones que Netflix realizó (entre 2018 y 2023), de alguna de los libros de Harlan Coben, autor estadounidense que ya ha vendido más de 75 millones de sus 33 novelas de misterio y suspenso.


Confieso no haber leído ninguno de los libros, así que no sé si es una cuestión que también aparece en las novelas o no, pero al menos en las series (ya vi también “Quedate en casa” y “No hables con extraños”), diría como enfaticé al inicio de estas líneas– que son atrapantes, prácticamente adictivas, porque mantienen la tensión de manera permanente. Pero a su vez son rizomáticas, en un mal sentido: las historias no paran de proliferar y a veces confunden, marean un poco.


Por otro lado, siguiendo cierta tradición de la literatura policial (incluso esa suerte de efecto más específica de los cuentos), toda la historia (todas las múltiples historias, paralelas pero que se van entretejiendo), terminan con un final un poco zonzo, o que no llega a estar a la altura de la tensión que (al ser además miniseries) logran sostener a lo largo de los capítulos anteriores, dejando esa sensación que podría expresarse en una sensilla frase: “¿ah, eso era lo que pasó?”